Hace ya casi ya 6 años que me jugué y completé al 100% este juego en la solitaria PSP que reside en el fondo del cajón de una de las estanterías de mi habitación. Se trata de un juego del 2006 del que solamente guardo algunos buenos recuerdos. Podría analizar la versión de Play Station 2, pero a pesar de tenerlo también, no he sido capaz de jugarlo y quizás en este análisis pueda esclarecer un poco los motivos. Hablando de motivos, recuerdo que uno de los grandes motivos de comprarme una PSP fue precisamente poder recorrer de nuevo las calles de GTA: Vice City, juego que me marcó tanto por su ambientación, jugabilidad, gráficos, personajes y un largo etcétera. Mientras este juego de la serie Grand Theft Auto no llegó a mis manos y habiéndome saltando a su predecesor espiritual portátil GTA: Liberty City Stories (materialización portátil de GTA 3), solamente había tenido contacto con el universo GTA a través de un ordenador, pues tanto los controles como los gráficos en consola me parecían frustrantes. ¿Por qué me lo pasé pipa con este juego entonces? Porque la PSP no era una consola normal; podríamos decir que fue la primera en intentar emular juegos de los grandes de la pasada generación en una máquina portátil tratando de ofrecer experiencias similares.
A la PSP de Sony le pasó lo mismo que a la portátil Game Gear de SEGA y es que fueron consolas que no han sabido encontrar su lugar en contraste con la sencillez y juego directo que siempre ha ofrecido Nintendo, su competidor en este mercado. ¿Logró la portátil de Sony sus objetivos? Pues la verdad es que no… una pantalla repleta de ghosting, un stick de control más bien molesto y una cruceta que aunque hacía su función, no terminaba de convencer, junto con un catálogo de juegos que no acompañaba y un montón de funcionalidades de las cuales unas se quedaron desfasadas en un par de años con la llegada de los smartphones y otras eran prescindibles, hicieron que esta consola, al menos desde mi punto de vista, fuese una pequeña decepción. ¿Era todo malo en PSP? No; PSP fue la plataforma ideal para la resurrección de juegos como Wipeout, para disfrutar de juegos casuales de partidas cortas como Ape Academy y juegos de carreras o para jugar a versiones o tramas secundarias de grandes juegos como God of War. No debemos olvidar tampoco al gran «scene» y equipos de programación que por amor al arte permitieron que fuese posible ejecutar emuladores de Mega Drive, Super Nintendo, Neo-Geo y otras tantas consolas de sobremesa en esta portátil. El juego que nos ocupa también ha sido uno de los grandes intentos por los que esta consola merecía la pena ser comprada, sin embargo no me siento demasiado satisfecho, porque en el fondo de mi cajón no he sido capaz de ver más que un ladrillo del cual guardaba unos buenos recuerdos, pero que tras encenderla y poner mi juego preferido para la misma… ¿Cómo diablos fui capaz de jugar a éso? He encontrado el origen de mi miopía, ya que supongo que en su día, intentar deducir personajes o armas en ese amasijo de polígonos ha debido de pasarme factura. Acto seguido, tras comprobar que era incapaz de rejugar cualquier fragmento del juego para analizarlo, me dediqué a ver las escenas cinemáticas que te dan al completarlo al 100% y he dedecir que aquí sí vi, en parte, el gran juego que recordaba.
Creo que voy a dejar un poco de lado la parrafada que estoy escribiendo porque no se ni a donde quiero llegar; la resaca del sábado todavía me está pasando factura. Resaca, precisamente resaca, drogas, malos tratos, personajes misóginos, violencia, sangre y tabiques nasales destrozados de meterse rayas de «yeyo» será lo que nos encontraremos en este juego. Manejamos a Victor Vance, hermano de Lance Vance, personaje secundario y gran hijo de «p***…spoilers mejor no» del GTA Vice City original. Se trata de un buen chico que se alista en el ejército para poder pagar la cara medicina que necesita su hermano mensualmente. Además su madre es una ninfómana y su otro hermano -Lance- un mafioso que no sabe hacer otra cosa más que meterse en problemas. Es en este juego en donde tendremos la oportunidad de ver la transformación de Lance en lo que será más tarde en Vice City, pues este juego es una precuela de su predecesor. La trama del juego se desarrolla en el año 84, dos años antes del transcurso de los actos de GTA: Vice City. La ambientación del juego es soberbia, dando en todo momento la sensación de situarnos en plenos años 80 siendo protagonistas de una serie estilo Corrupción en Miami, pero del bando de los chicos malos. La banda sonora del juego es excepcional, contando con temas de Depeche Mode, The Cure, Yaz, Berlin, Toto, Foreigner, The Pretenders, Exodus, Marvin Gaye, New Order, Barry White, Kiss, Blondie, Genesis o música cubana como el famoso éxito «Oye como va» de Tito Puente. Además el juego cuenta con la aparición estelar de Phill Collins como estrella invitada, para el cual realizaremos varios encargos e incluso asistiremos a un concierto en el cual se recrea el tema «In the air tonight» en vivo con todo lujo de detalles. En este sentido, el juego iguala e incluso llega a superar a su predecesor. El teniente del ejército jerry Martínez, un tipo no demasiado patriota, sin principios morales y fan de las farlopa y el porno con animales, será quien nos guiará y nos instará a adentrarnos en el mundo de corrupción que nos presenta el juego.
En cuanto a los personajes, Rockstar ha hecho de nuevo en trabajo impecable en su caracterización, escenas cinemáticas, líneas de diálogo y doblaje. Volveremos a ver y realizaremos misiones para conocidos tipejos como Phil Cassidy, Ricardo Díaz, Humberto Rovira o la actriz porno Candy Suxxx. Parece que el destino le jugará una mala pasada tras otra a Victor, nuestro protagonista y se verá envuelto en temas de robos, extorsión, drogas, asesinatos y demás delitos a los 5 minutos de juego.
Los vehículos son los ya conocidos, salvo por la incorporación de nuevos modelos de coches, motos y bicicletas, además de presentar la novedad de los quads, jamás vistos en toda la saga GTA. En cuanto a novedades con respecto al anterior juego de la saga dentro de la portátil encontramos vehículos aéreos como helicópteros de varios tipos o aviones. También podremos conducir todo tipo de lanchas, barcos y motos de agua. A pesar de contar con un solo stick analógico, el sistema de control de la PSP se adapta muy bien a todos los vehículos.
El mayor problema del juego reside en el manejo de Victor cuando va caminando o nadando, pecando de unas animaciones antinaturales y forzadas, sin transiciones de movimiento en muchos giros. Aunque nos terminemos acostumbrando al manejo de nuestro personaje, el sistema de apuntar, seleccionando a nuestro objetivo y disparando automáticamente, no ayuda a mejorar el control. También podremos disparar con un punto de mira, aunque su acceso no resulta nada espontáneo, estando implementado como algo puntual, siendo algo que debería estar mucho más trabajado. Jamás me ha gustado el sistema de control de los GTA en Play Station 2, ganando por goleada un teclado y un ratón, pero el caso de PSP ha sido la gota que colma el vaso. De todos modos, hemos de darle una oportunidad a nuestra paciencia y acomodarnos a los mandos para poder disfrutar del gran juego con gran historia que hay detrás.
La ciudad no es un calco de lo que hemos visto anteriormente en Vice City, ya que diversas áreas antes edificadas ahora presentan otras estructuras como un parque de atracciones o edificios en construcción. Podemos decir que el cambio ha sido positivo, ya que es un modo de otorgar algo de variedad y personalidad al título que nos ocupa. Las animaciones de los transeúntes han sido mejoradas, de modo que lucen incluso mejor que en el Vice City original, pero sin embargo las texturas pierden resolución y las imágenes por segundo caen algo en picado, compensando otras mejoras aunque el número de polígonos en pantalla sea mayor. El conjunto es en general bueno y ha sido considerablemente mejorado con respecto a GTA: Liberty City Stories, pero tampoco raya la excelencia, quizás más por limitaciones de la consola que por limitaciones del juego… en mi caso el efecto ghosting de la pantalla de las primeras versiones de PSP consiguió darme alguna pequeña molestia ocular. También se mantienen algunos fallos gráficos de clipping y popping, pero no resultan tan molestos ni perceptibles como el fallo antes citado. Pese a todo, se trata de uno de los mejores motores gráficos que ha aparecido para PSP en todo su ciclo de vida, siendo algo a tener en cuenta tras toda la estela de mediocridad tanto anterior como posterior.
Jugablemente, las novedades son la habilidad de poder nadar (que no bucear) y el hecho de poder comprar o robar locales a bandas enemigas y convertirlos en negocios de prostitución, extorsión y protección o tráfico de drogas, entre otros. Deberemos realizar varias misiones en los locales y defenderlos de posibles ataques enemigos, siendo los mismos aleatorios, tal y como ocurría con las guerras de pandillas en GTA: San Andreas. Estos negocios nos irán proporcionando dinero y reputación, pero eso sí, deberemos estar pendientes de llegar lo más pronto posible ante algún ataque. Dichos locales estarán rodeados de miembros de nuestra banda a los que podremos reclutar, aunque son un poco torpes. Todo un acierto que aporta variedad al título.
También nos encontraremos con las ya conocidas misiones de taxista, bombero, conductor de ambulancia, vigilante o pizzero junto con un nuevo tipo de trabajo como socorrista. También podremos jugar al golf entre otros minijuegos que nos encontraremos repartidos por la ciudad y dispondremos de varios listados de vehículos para robar al igual que seguirá habiendo carreras de motos, coches y quads. En una misión, incluso manejaremos a un robot de servicio doméstico en primera persona, aunque eso sí, su diseño y animaciones se sitúan por debajo del límite de lo cutre. Esta vez, los objetos ocultos han sido sustituidos por 99 globos rojos que deberemos hacer explotar con algún arma (guiño al tema 99 Luftballons). El sistema de guardado es también el habitual; deberemos acudir a nuestra casa o lugar de descanso entre misión y misión.
Disponemos también de varios tipo de modo multijugador gracias a la opción WI-FI de la PSP. Hay un total de 10 modos de juego y más de 100 personajes con los que jugar. Los modos son:
- Sobrevive en Vice City: Es el clásico modo deathmatch de todos contra todos en el que sencillamente debemos sobrevivir en la ciudad.
- Asfalto en llamas: Es un modo de carreras con varias opciones; carreras normales seleccionando entre los vehículos que aparecen en un listado, un triathlon motorizado en el que competimos por tierra, mar y aire con diversos tipos de vehículos y finalmente tenemos un modo exclusivo de competiciones sobre motos de agua.
- Guerra de pandillas: Seleccionaremos entre el bando de los Cholos o el de los Cubanos y deberemos proteger nuestro vehículo (Sabre o Hermes) y atacar al del vehículo contrario. Hay respawn siempre y cuando no destruyan nuestro vehículo.
- Ésto me lo llevo: Se trata de robar el vehículo de la banda rival por equipos y evitar que el bando contrario robe el nuestro.
- Traqueteo de tanque: Tendremos que robar un tanque Rhino y cargarnos al resto de jugadores antes de que destruyan el tanque. Si el tanque cae en manos de otro jugador, deberemos destruirlo a él.
- Hambre de Hunter: Como Traqueteo en el tanque, pero con un helicóptero Hunter.
- Tú eres el siguiente: Se seleccionará a un jugador aleatoriamente y el resto deberán acabar con él.
- Grand Theft Auto: Deberemos acudir a un lugar marcado en el mapa para hacernos con un vehículo y llevarlo al punto de recogida, en donde dependiendo del estado en el que llegue, recibiremos más o menos dinero. Hay una determinada cantidad de dinero que deberemos conseguir para ganar la partida.
- La caída del imperio: Por equipos, deberemos defender nuestra base del enemigo y atacar la suya. Hay que destruir un vehículo enemigo situado en su base y terminar con el bando opuesto.
- VIP RIP: Por equipos, en cada uno de ellos se selecciona a un jugador al que el resto de miembros deberán proteger y evitar que sea asesinado.
Poco más que añadir; se trata de un juego sobresaliente para PSP al que quizás los años no le han sentado nada bien, siendo ahora mismo poco rejugable incluso en su versión para Play Station 2. Siendo objetivos y consecuentes con las limitaciones técnicas de la plataforma para la que ha sido desarrollado, este juego se merece un 8,6.
El juego está muy bien, creo que mejora al Vice City, por mucho que Tommy Vercetti nos haya marcado. Tiene personajes y misiones muy bien trabajados, gente que sale en el GTA 3 y Vice City y que hace que estemos atentos a ellos. La historia del tipo más o menos honrado que se ve envuelto en mil marrones me gusta más que la del mafioso sin remedio.
Tenía la partida avanzada hasta cuando aparecía Phil Collins, en la PS2, pero como se me estropeó… a ver si puedo pasar la partida al ordenador y algún día lo terminaré vía emulador. El control… bueno, al pasar el tiempo se echan de menos las coberturas y, como dices, animaciones no tan eléctricas, pero se va tirando, jejeje.
A mi me ha resultado complicado ponerle una nota, más que nada porque el catálogo de la PSP es 90% prescindible. El Vice City original fue el primer sandbox con un protagonista que hablaba y esas cosas, en el stories también hay muchas cosas metidas con calzador, como lo de manejar al domestobot XD. La cuestión es que si el Liberty City Stories se merece un 7 como juego de PSP, este ha corregido casi todos sus defectos.
Se me hace raro que lo hayas intentado jugar, porque yo no puedo con los GTA en PS2. Además creo que este tipo de juegos no son para una consola sin disco duro; EJEmMmMmM (tortura al juego).
Quizá por eso se me fastidió, los dos últimos juegos a los que más caña les di fueron éste y el Bully…
No sería mejor que jugases a la edición mejorada del Bully que hay tanto para PC como para XBox 360? Tengo ambos, te los paso cuando quieras 😀 (Sí, con el de PS2 el lector hace un ruido horroroso).