Silent Hill 2 / Análisis (Playstation 2, PC – 2001)
Antes de hablar un poco del juego me gustaría animar a probar Silent Hill 2 a toda la gente que no lo ha probado todavía, bien por falta de tiempo para jugar, bien por el temor a que sea un juego difícil o con posibilidades de que uno se atasque. Silent Hill 2 es facilísimo. Al menos éste era mi temor y por eso lo dejaba en pendientes -se me dan mal este tipo de juegos- y resulta que me han sobrado, jugando en nivel fácil, 10 ampollas, 25 botiquines y 30 bebidas isotónicas de curación; y 300 balas de pistola, 120 de escopeta y 60 de rifle. Además, el juego se puede terminar perfectamente, en la primera partida, en menos de 6 horas sin pararse a explorar mucho, por lo que si buscas un juego corto para desconectar un poco de aventuras largas, Silent Hill 2 es una muy buena opción.
Silent Hill 2 tiene ganada a pulso la fama de «juego de culto», y será uno de esos juegos que nos encontraremos, con toda seguridad, en las listas de «Grandes Juegos de la Historia» dentro de varios años en la blogosfera. El juego es continuista con lo visto en su primera parte, con el pueblo de Silent Hill como escenario para contar una historia, y una cuidada ambientación sonora y visual para construir un ambiente opresivo y terrorífico. La jugabilidad mejora mucho lo visto en Silent Hill 1, sobre todo, lo relativo al movimiento del personaje, aunque el combate con armas de contacto sigue siendo muy mejorable (a veces, da la sensación de que el protagonista no suelta el golpe por mucho que le demos al botón). Podemos controlarlo como los primeros Resident Evil, o habilitar el modo de control 2D -recomendado-, que nos dará mayor precisión en la mayoría de pantallas, ya que sólo en algunos puntos tendremos cámaras fijas, y en la mayor parte del tiempo podremos poner la cámara detrás de nuestro protagonista, en una tercera persona normal.
Los gráficos podrían ser mucho mejores. Aunque la construcción del pueblo y los interiores son de un nivel altísimo, con un montón de detalles que consiguen ponernos en tensión a cada paso que damos, la realidad es que jamás veremos a más de 5 metros por delante de nosotros. La mayor parte del tiempo estaremos rodeados de niebla y oscuridad, y se echa un poco de menos que en algunas zonas hubieran puesto un poco más de variedad, en especial en zonas exteriores y algunos pasillos. También hubiese estado bien meter más sitios en los que poder entrar en el juego, ya que se acaban haciendo muy pocos los edificios que visitar y los documentos que leer. No obstante, Silent Hill 2 no es un juego en el que la calidad gráfica sea algo demasiado importante. De hecho, en combinación con su sobresaliente apartado sonoro, consigue su objetivo, que es transportarnos a ese pequeño pueblo en donde parecen florecer todos nuestros secretos…
La historia.
Personalmente, nunca había visto ningún otro juego que tratase un tema tan humano como el que trata Silent Hill 2. La historia, con muchas interpretaciones propias, termina siendo algo muy personal y alejado de todo lo que nos imaginamos en un primer momento. James Sunderland llega al pueblo con la esperanza de encontrar a su esposa, y a partir de ahí iremos acompañando al protagonista en su búsqueda de la verdad. El último tramo es genial; es cuando empezamos a encontrar respuestas para James cuando Silent Hill 2 te atrapa de verdad. El juego tiene seis finales diferentes -tres de ellos secretos- en función de nuestro comportamiento durante la partida y de cómo nos relacionemos con otros personajes. Mención especial para un par de momentos en la aventura en los que dejamos de lado el terror para encontrarnos a nosotros mismos delante del juego con cara de WTF, con Konami rompiendo la cuarta pared y dándonos una colleja.
Por otra parte, Silent Hill 2 cumple con lo que se suele decir de que quizá es más efectivo sugerir que mostrar. En la mayoría de las ocasiones no serán los enemigos los que nos pongan en alerta y nos hagan tragar saliva, sino la falta de estos. Un ruido, una puerta que se cierra, la lectura de informes médicos, graffitis en la paredes… los mejores momentos son, sin duda, los pequeños pedacitos de información que iremos encontrando. Incomprensibles al principio, comprenderemos su utilidad conforme avancemos, a veces para resolver puzzles y a veces como pistas para comprender lo que está sucediendo. Y, al contrario, saber que detrás de la siguiente sala nos vamos a encontrar con algún personaje y vamos a escuchar la melodía que suena cuando compartirmos una zona con alguien humano consigue relajarnos; es como ese momento de encontrar la sala con el baúl y la máquina de escribir en los primeros Resident Evil -aunque todavía recuerdo cierto momento en Code: Verónica en el que llegabas muy feliz a un baúl y te aparecían monstruos-.
En resumen, Silent Hill 2 es muy recomendable para todo aquel que busque una historia original y le apetezca un juego corto (aunque rejugable) y eche de menos un buen survival horror de los clásicos, antes de que Resident Evil mutase en un Metal Gear Matrix Pokemon Shenmue GTA Resident of Duty Solid 6. Recomiendo la versión de PC o Playstation 2, que podéis encontrar en el montón de juegos de segunda mano de cualquier tienda a 3 ó 4 euros, y no ir a por la versión remasterizada en HD que salió hace poco para 360 y Playstation 3, ya que las mejoras son mínimas y al parecer, en XBOX 360, el port no está demasiado bien realizado.
Yo tengo el Shatterd Memories para la Wii y es de lo mejor que he jugado del género SH. La historia excelente y la tensión brutal. Nunca un juego me dió tanto canguele xD
*Quería decir Shattered Memories 😀
Esa mierda de shattered memories, no es diferente a cualquier shooter con muchos bichos atacandote, eso no es terror.