Strider / Análisis (PC,PS3,X360,PS4,XONE – 2014)

En el desarrollo de videojuegos, mirar al pasado puede ser beneficioso de vez en cuando. Siempre con cautela, pero viendo que funcionaba y como podría ser mejorado en los tiempos actuales. Este podría ser el caso que nos atañe, Strider. Lanzado en Febrero de 2014, supuso el reencuentro de Capcom con un género que parecía olvidado, los plataformas de exploración en 2D. Un juego hecho con los preceptos de clásicos como Metroid o los Castlevania de PSX. De hecho, es un género conocido como «Metroidvania».

Strider también es un reboot, de una saga condenada al ostracismo por la propia Capcom. Olvidada durante décadas desde principios de los 90, decidieron rescatarla a lo grande. Bajo la batuta de Double Helix Games, desarrolladora norteamericana, se creó el ecosistema perfecto para un plataformas vibrante y explosivo.

En una época donde se tiende a desarrollos costosos, grandes cinemáticas y scripts absurdos, Strider nos devuelve a una época donde los juegos eran difíciles y la historia importaba poco o nada. Strider es un ninja enviado a Kazakh City para acabar con el gran maestro Meio y todos sus secuaces. Bajo este pretexto, tendremos que arrasar con todo lo que veamos, armados solamente con nuestra espada y nuestras habilidades de salto y reflejos.

La progresión de Strider no difiere en absoluto de juegos como Super Metroid. Empezaremos con habilidades básicas, pero avanzando y derrotando a los diferentes jefes, conseguiremos nuevas habilidades, como la posibilidad de hacer rebotar los disparos, lanzamiento de kunais o distintos potenciadores de ataque y salto. Al final del juego, acabaremos con un personaje totalmente completo para terminar con el jefe final. Por supuesto, las diferentes zonas de Kazakh City se abrirán conforme consiguemos ciertos potenciadores o derrotemos a determinados jefes, pero esta todo diseñado para que se produzca de manera natural. Tendremos un área de juego bastante grande para explorar y encontrar todas las mejoras de salud, energía y los distintos secretos desbloqueables, que incluyen niveles para dos modos de juego aparte.

Durante el juego, no dejará de invadirnos esa sensación de nostalgia, y sobre todo, diversión. Strider es un juego divertido, y que no dará un respiro al jugador mientras acabamos con los secuaces del gran maestro Meio. Las distintas habilidades y ataques especiales nos abrirán nuevas formas de acabar con nuestros enemigos, y de incluso combinarlas para crear ataques espectaculares. Otro punto diferenciador incluye el hecho de que Strider porta un piolet. Esto le permitirá escalar cualquier pared o incluso colgarse de los techos y avanzar por ellos, a diferencia de otros juegos de corte similar. Abre bastantes posibilidades para crear nuevas estrategias y descubrir secretos bien guardados.

La variedad de escenarios es bastante amplia, desde el centro histórico de Kazakh hasta unos laboratorios de clonación, pasando por las alcantarillas y la ciudad subterránea de los refugiados. Esto afectará también al tipo de enemigos que el juego nos lanzará. En unas zonas tendremos a soldados normales, pero en otras nos enfrentaremos a soldados clonados o incluso soldados zombies. Incluso el juego nos mandará a clones de jefes derrotados, con bastante menos vida, para alargar algunos combates.

En cuanto a la dificultad, Strider puede ser un juego difícil, dependiendo de nuestra habilidad con el plataformeo y nuestros reflejos. No es para nada mas dificil que Metroid Fusion, por ejemplo, pero si no somos unos asiduos de este tipo de juegos, podremos atascarnos mas de una vez, especialmente con algunos jefes. A diferencia de otros «Metroidvania», el juego nos indicará siempre a donde tenemos que ir, un tema que se agradece para aquellos jugadores olvidadizos o que se pueden frustrar muy rápido al perderse por la jungla urbana que Strider nos presenta.

Gráficamente hablando, Strider es un juego bonito, con mucho colorido y una estética inequívocamente cartoon, frente a otros juegos de corte mas realista. A veces parecerá que estamos en un dibujo animado tridimensional. Cabe mencionar la cantidad de efectos de luz que posee, y su variedad, lo cual acaba creando un bonito espectáculo de fuegos artificiales, cuando muchos enemigos nos atacan a la vez. Aunque el juego se desarrolle en 2D, tendremos profundidad en los escenarios, y en el fondo siempre estará ocurriendo algo, como enemigos pasando o fortalezas voladoras. La cámara, dependiendo de la apertura del escenario, a veces nos mostrará a Strider muy cerca, y otras veces de manera mas lejana para poder guiarnos en ataques de múltiples enemigos, pero en ningún momento llega a molestar. De hecho, cuando tengamos enfrentamientos cerrados, se acercará para darle un toque de espectacularidad al combate.

El juego corre a 60 frames por segundo en PC y consolas de nueva generación, mientras que en Playstation 3 y Xbox 360, debido a limitaciones técnicas, corre a 30 frames por segundo y menos resolución. Debido a la rapidez y frenetismo del juego, es preferible escoger la versión de nueva generación o la de PC, que incluso se puede poner a resoluciones 4K Ultra HD.

La duración de Strider no es su punto fuerte precisamente. Pero dentro del género «Metroidvania», quizá sea de los mas largos que se han hecho, con permiso de Shadow Complex (del que intentaré hablar otro día). Tiene un logro que consiste en acabarlo en menos de 4 horas, pero para un jugador tipo, la duración estimada sin sacar el 100% estaría en torno a las 6-7 horas. Una duración mas que aceptable por los 14,99 euros que cuesta. Y eso sin incluir los otros dos modos de juego, y volver a rejugarlo en difícil para sacar el 100%.

Strider es ante todo un juego completo, que recoge todas las buenas ideas de otros «Metroidvania», las fusiona convenientemente, y se convierte en uno de los mejores juegos que han salido de Capcom desde hace unos cuantos años. Totalmente recomendable para pasar unas buenas tardes de frenético entretenimiento.