Un jarcor cansado

En menos de 10 días, Rajoy anunciará nuevos recortes para España. Recortes, que no reformas, puesto que aquí, desde hace muchos años, nadie le ha echado los huevos suficientes para hacer algo decente por este país. Tenemos variables desastrosas (educación, pobreza, desahucios) mientras somos líderes en cosas vergonzosas (consumo de drogas, paro). Hay que dejar de gastar, por favor, no hace falta ser un doctor en economía para saberlo. No paramos de endeudarnos año tras año, y este año tendremos que pagar 39.000 millones sólo de intereses de deuda (se habla de que el año próximo podrían llegar a ser 43.000 millones). ¿Cómo acabarían sus finanzas si en sus casas, mes tras mes, gastasen un 6% más de lo que ingresan? Pues la catástrofe que se imaginan es como están dejando a España unos dirigentes incompetentes, ineptos, corruptos hasta la médula y privilegiados hasta decir basta.

No hay ganas de cambiar las cosas. Unos están dirigidos por los sindicatos mayoritarios, con sospechas cada vez más crecientes de corrupción y unos abanderados del igualitarismo más atroz. Otros, franquistas disfrazados, nos han mentido, engañado y toreado, no son capaces de purgar sus males y no se atreven a romper la baraja de una vez ante el miedo a una derrota electoral.

Vivimos en un país en donde el que trabaja no es un privilegiado: es un idiota. Es un idiota que paga religiosamente mientras unos vagos viven de su limosna, unos listos evaden impuestos y unos, más listos todavía, la lían parda y son rescatados con el dinero de todos.

¿Qué hay de solucionar el problema de la educación? ¿Qué hay de apostar, de una vez por todas, por la educación pública, eliminando desgravaciones y ayudas de dinero a la educación privada? ¿Qué pasa con las diputaciones, barrizal de los enchufismos, incompetencia y ejemplo perfecto de lo que es una institución antidemocrática? ¿Qué vamos a hacer con la morosidad, que está secando a las pymes? Y, por otra parte, ¿qué hacemos con nuestras pymes? ¿Cuándo apostamos por crecer de verdad y ser más eficientes y productivos? ¿Alguien ha dicho que hace falta un contrato único y agilizar un mercado laboral retrasado? ¿Cómo es eso de la formación dual e integración de la vida laboral con la personal? ¿Combatir el fraude fiscal y los paraísos fiscales? ¿O ser acordes a la media europea y que el estado deje de funcionar como una máquina recaudatoria? ¿Y qué pasa con ser líderes en innovación en algún sector tecnológico?

¡¡Nada de nada!! Recortes injustos, medidas electorales las unas y retrógradas, las otras. Y lo peor de todo: la oposición no inspira la más mínima confianza. ¿Qué nos va a pasar? ¿Qué diablos están haciendo con nuestras vidas, si no es para convertirnos en la mano de obra barata de nuestros vecinos del norte?