Plants VS Zombies / Análisis (PC, Android, iOS, XBox360, PS3, PSP, PSVita, DS, 3DS – 2009)

Cuando comenzó la moda de los juegos indie no solamente se crearon mecánicas de juego novedosas y complejas con gráficos simples, sino que también aparecieron algunas pequeñas joyas más casuales como Castle Crashers o el juego que nos ocupa, Plants VS Zombies. El juego ha sido creado por PopCat Games y nos presenta el típico concepto del género tower defense pero en un contexto un tanto particular. Nuestra casa será atacada por hordas de zombis y deberemos defenderla sembrando plantas de varios tipos.

Sembrando el pánico… de los zombis!

No cabe duda de que estamos ante el juego ideal para los acérrimos a la moda de la dieta vegana. Disponemos de cuatro modos de juego: Modo aventura, Supervivencia, Puzzle, Jardín Zen y por último una serie de mini juegos.

En el modo aventura disponemos de un jardín dividido en cuadrículas, que será en donde tendremos que sembrar las plantas. Al principio dispondremos de pocos tipos de semilla, pero según progresemos desbloquearemos un sinfín de tipos de planta. Para colocar una semilla será imprescindible recolectar el recurso fundamental del juego, que no es otro que la luz del sol, que irá cayendo en forma de un icono con forma de… adivinad… sí, de luna! (que no, que tiene forma de sol). Además, también tendremos que plantar girasoles para que retengan y produzcan más cantidad de este recurso.

El juego representa fielmente toda la crudeza de una posible violenta guerra contra los zombis.

El número total de plantas es considerable; pues resulta que tenemos un total de cuarenta variedades, cada una con un diseño y funcionalidades únicas. Las plantas más básicas dispararán guisantes, pero pronto conseguiremos cactus, plantas lanzadoras de maíz, setas, guindillas explosivas o una extraña variedad similar a una calabaza que hará que nuestros enemigos, que ya de por sí avanzan despacio debido a su naturaleza, lo hagan aún más teniendo que pararse a destrozar la calabaza. Habrá también escenarios con piscinas en los que podremos colocar las plantas sobre nenúfares, pero resulta que estos zombis, aunque no saben nadar, no dudarán en ponerse un flotador para compensar sus limitaciones físicas. Con el tiempo obtendremos también versiones mejoradas de plantas que ya teníamos, que lanzarán más proyectiles y otros tipos de munición mejorada.

Los zombis irán llegando en grupos y al final del nivel llegará una gran horda a la que deberemos hacer frente. Su objetivo es el de atacar nuestra casa, que tendrá una barra de vida que podremos devolver a su estado original entre nivel y nivel. Como última barrera tenemos también unas máquinas corta césped que se llevarán a todo lo que encuentren por delante, pero, cuando se vayan, no las volveremos a ver.

El juego dispone de un total de 100 niveles y, aunque parezca raro, no se nos hará aburrido avanzar por ellos. A pesar de la sencillez del juego, siempre estaremos haciendo algo, además de estar pendientes de cuándo podemos colocar cada planta, ya que tendremos que esperar un tiempo determinado cada vez que sembremos una planta antes de poder volver a plantar otra del mismo tipo. Además de plantas, podremos adquirir objetos entre nivel y nivel que nos harán la vida más útil. La mayor pega del juego quizás sea que los escenarios son muy poco variados, dando la sensación de estar siempre en el mismo. Con los zombis sucede algo similar; su diseño es variado en cuanto a lo que hacen pero su apariencia es muy parecida. Cabe destacar uno de ellos que se desplaza haciendo el famoso baile de Michael Jackson, homenajeando su famoso videoclip de Thriller. Como veis, se trata de un juego aterrador, digno vástago del género survival horror.

En general, la dificultad del juego no es muy elevada, siendo un producto entretenido y apto para todo el mundo, ideal para llenar esos momentos muertos en los que tendemos a mirar el facebook. Como veis, el juego está disponible en múltiples plataformas e incluso online. Si queréis. también podéis jugar a Plants VS Zombies en vuestro navegador, así como a diferentes versiones no oficiales que podréis encontrar.

Los gráficos son los esperados para un juego realizado con Flash, es decir, coloridos y sencillos. Para los efectos sonoros tampoco es que haya margen para decir si son buenos o malos, por lo que nos limitaremos a decir que hacen su función. Los diálogos… pues suelen ser algo así como «blup, blup» para las plantas y «Uaaah, uohhha» para los zombis invasores.

Igualito que el capítulo del asedio al muro en Juego de Tronos.

Hablando ahora de los otros modos de juego extra, el modo Supervivencia es parecido al modo Aventura pero con una mayor dificultad. El modo Puzzle nos presentará una serie de objetos limitados con los que deberemos completar cada nivel. El modo Jardín Zen va de crear y cuidar un pequeño jardín utilizando los productos habituales; palas, abonos, fertilizantes….

Para terminar, tenemos un modo de mini juegos en el que deberemos hacer cosas como jugar a los bolos para derribar zombis.

Diferencias entre las distintas versiones

Las versiones de XBox One y XBox 360 tienen un modo para decorar la casa, plantas que impiden ver a los zombis y un modo para dos jugadores en el que un jugador toma el control de las plantas y el otro de los zombis.

La versión de Nintendo DS que salió en el año 2010 dispone de mini juegos adicionales. La de 3DS es exactamente igual.

La versión de PlayStation 3 y la de PS Vita tienen una mayor resolución y además se ha cambiado un poco la mecánica de juego haciendo que todo sea más acelerado. Los zombis avanzarán más rápido hacia nosotros, pero nuestras plantas también serán más rápidas.

Las versiones para Android e IOS son prácticamente idénticas.

Por último, además de la versión estándar de PC, también tenemos la de Steam, que es como la de PlayStation pero con resolución panorámica, logros y SteamCloud integrado.

En resumen

Por lo que cuesta el juego, que son unos 6 euros, merece la pena. No será el juego de estrategia del año, pero debido a la poca competencia que había durante el año 2009, pudo haberlo sido.