QWOP / Análisis

QWOP fue un juego basado en flash que fue originalmente creado en el año 2008 por un tal Bennett Foddy. Los jugadores controlan a un atleta llamado «Qwop» usando lasteclas Q, W, O, P.

En la primera versión solamente había una prueba que era la de los 100 metros lisos de los juegos olímpicos. Usando las teclas antes mencionadas podíamos mover las distintas partes de las dos piernas del atleta. Parece sencillo pero tan sólo el hecho de dar dos pasos sin que el atleta se cayese requería una sincronización perfecta y era todo un reto. La gente acababa tan hasta las pelotas del juego que su autor recibía emails de gente quejándose a diario e incluso llegaron a insultarlo.

El juego se hizo mundialmente famoso e incluso llegó a aparecer en la novena temporada de The Office. También fue uno de los juegos destacados del Museo de Arte Moderna de Nueva York en el año 2011. Incluso existe un record Guinnes que fue concedido a una tal Roshan Ramachandra al lograr recorrer los 100 metros en solamente 51 segundos; el menor tiempo jamás conseguido.

En ese mismo año, en el 2011, salió una versión comercial para Android e iOS con algunos cambios. Esta versión es distribuida por Noodlecake Studios y podéis encontrarla en Goolge Play y en la APP Store por menos de 1 €. Es la que aquí analizamos.

Jugando a QWOP para Android e iOS

En Qwop nos encontramos básicamente con un recorrido recto en el que avanzar es todo un logro. Esta versión tiene el mismo pretexto que el original pero sus controles son diferentes y su nivel de dificultad es aún mayor. Para que os hagáis una idea de la dificultad de jugar que puede suponer jugar a QWOP con una pantalla táctil, se estima que la dificultad de esta versión es 4000 veces superior que la del juego original.

Los gráficos siguen siendo bastante cutres pero se han mejorado los fondos y las texturas del atleta, que en esta versión tiene cara y todo. Los efectos de sonido casi se reducen al «doh!» de cuando el atleta se cae el suelo a los pocos segundos de haber comenzado la partida. Cuando damos más de un paso seguido, sonará de fondo la típica melodía olímpica, pero pronto nos caeremos al suelo, así que es como si nada, aunque motiva. Solamente con deciros de que mis primeros pasos fueron hacia atrás en lugar de hacia adelante, creo que os podréis hacer una idea de la dificultad del juego.

No, no es nada fácil. Dan ganas de tirar el teléfono por la ventana.

En esta versión tenemos en pantalla algo así como dos diamantes en los que debemos mover los dedos para realizar los distintos movimientos con cada parte de las piernas. Además el atleta se inclinará en el sentido en el que inclinemos nuestro dispositivo. Es más, si dejamos el teléfono sin tocarlo encima de una mesa completamente lisa, el atleta se caerá al suelo igualmente. Una locura.

También tenemos más pruebas como los 110 metros obstáculos, salto largo, carrera de obstáculos y 50km marcha (sí, habéis oído bien). Lo cierto es que si la prueba original ya era complicada, imaginad cómo será tener que coger impulso para saltar vallas situadas en mitad de la pista.

Cada vez que nos caigamos al suelo se mostrará en pantalla un periódico llamado The Track & Field una noticia hablando del retiro de Qwop del atletismo… aún por encima se ríen de los jugadores!

Salvo que os vaya el sado masoquismo no os recomiendo este juego. Habitualmente alabamos las experiencias complicadas siempre y cuando nos aporten algo, pero es que lo único que aporta este juego es frustración. Ni curva de dificultad, ni aprendizaje progresivo… ésto es un sufrimiento.